El proyecto INFACT mide tanto campos magnéticos y gravitacionales naturalmente presentes como campos electromagnéticos artificialmente inducidos. Estas mediciones se toman gracias a sensores no invasivos que serán transportados por helicópteros.

Estas técnicas geofísicas se usan habitualmente en la exploración de todo tipo de recursos naturales, así como en estudios de ingeniería y medio ambiente.

Para más información, por favor visite la sección técnica de nuestra página web (en desarrollo).

Está por determinar, pues el proyecto INFACT persigue probar la efectividad de tecnologías no invasivas aerotransportadas y, en base a ello, establecer en qué medida será posible reducir la necesidad de los métodos tradicionales terrestres, como las perforaciones.

Sin embargo, seguramente siempre será necesaria cierta exploración geofísica terrestre para definir depósitos minerales.

La información sobre las campañas de vuelos está disponible en una sección específica de nuestra página web (en desarrollo). Cada campaña de vuelos durará aproximadamente una semana por cada enclave de referencia. El número máximo de horas voladas cada día dependen de la legislación vigente en cada país, si bien generalmente suelen ser cinco horas al día durante seis días a la semana.

Los helicópteros a emplear generarán un nivel de ruido similar al de helicópteros de rescate o de policía. El nivel de ruido medio percibido en cualquier punto sobrevolado por el helicóptero será de 84,4 dBA. El equipo de exploración geofísica no emite ruido.

Los helicópteros del proyecto volarán a una altura de entre 60 y 200 metros sobre el suelo. Los sensores transportados colgarán a una altura de entre 30 y 100 metros sobre el suelo. El rango de alturas depende de las características del terreno sobrevolado. La velocidad de los helicópteros será relativamente lenta, entre 90 y 100 km/h.

La información es recabada en cada una de las regiones de referencia por nuestros socios locales. Será analizada por especialistas técnicos del proyecto INFACT.

Los resultados serán divulgados en publicaciones científicas, revistas de acceso abierto y a través de esta página web.

La fecha exacta en que nuestros resultados estarán disponibles está por determinar. Se informará a través de estas FAQs.

Sí, en cada región de referencia se van a realizar eventos públicos para informar sobre el proyecto INFACT.

La planificación de estos eventos estará disponible en nuestra página web.

No. Los equipos de exploración solamente miden los campos geofísicos y la topografía, no pueden hacer fotografías o registran cualquier otra información.

En los eventos públicos, cualquier información recabada será tratada de acuerdo a la nueva regulación europea en materia de protección de datos (RGPD).

El proyecto INFACT trabaja junto a empresas e instituciones europeas que son especialistas en el uso de estas tecnologías. Los equipos de exploración provienen de Alemania, Dinamarca, España y Sudáfrica.

El proyecto INFACT es independiente del sector minero. Las tres regiones de referencia se han escogido porque sus características geológicas, ambientales y sociales ya han sido estudiadas, y no para identificar nuevos depósitos minerales.

Las empresas mineras y de exploración que participan en el proyecto son socios que proveen los enclaves de referencia, territorios que ellos ya han estudiado y cartografiado, para que los resultados obtenidos de la exploración no invasiva puedan ser contrastados.

Esto permitirá al proyecto investigar y desarrollar técnicas y protocolos de exploración que sean social y ambientalmente aceptables.

El término “enclaves de referencia permanentes” significa que, en caso de ser viables, el proyecto INFACT espera convertir los enclaves de referencia en campos de pruebas para nuevas tecnologías de exploración geofísica respetuosas con el medio ambiente y que cuenten con aceptación social.

Por este motivo valoramos su colaboración e implicación en cualquier aspecto del proyecto.

Los drones no se van a utilizar durante las campañas de vuelos de 2018, pues requieren tanto de un equipo de exploración aún más innovador como de lo experimentado durante los vuelos con helicópteros. Los drones se usarán en próximo verano, en 2019.

La mayor parte de los métodos innovadores que se van a probar en el proyecto INFACT son tecnologías “pasivas”, por lo que no producen ningún tipo de energía y no representan un riesgo para la salud humana.

Sin embargo, algunos de los equipos a utilizar generan pequeños campos electromagnéticos. Las investigaciones sobre sus efectos en la salud humana concluyen que éstos son despreciables. De hecho, la fuerza y frecuencia de estos campos electromagnéticos en cualquier punto de la superficie terrestre sobrevolado por el helicóptero son similares a los emitidos por una placa de cocina eléctrica. Ambas emisiones son varios órdenes de magnitud inferiores al campo magnético natural de la Tierra.

El recorrido y los horarios de los vuelos se van a planificar para minimizar cualquier perturbación a la población residente en los enclaves de referencia.

La mayor parte de los equipos de exploración son “pasivos”, por lo que no generarán ninguna señal que pueda causar interferencias.

Sin embargo, algunas de las tecnologías a emplear son “activas” y generan pequeños campos electromagnéticos. Es posible, aunque altamente improbable, que puedan producirse interferencias puntuales en la red de telefonía móvil, en señales radiotelevisivas y otras radiofrecuencias.

La intensidad de estas señales en cualquier punto de la superficie terrestre sobrevolado por el helicóptero son similares a los emitidos por una placa de cocina eléctrica o de inducción. Por ello, dispositivos electrónicos sensibles como los marcapasos no deberían verse afectados por los campos generados.

Los equipos de exploración no tendrán un impacto sobre el medio ambiente, ya que la mayor parte de ellos se limita a registrar los campos electromagnéticos naturalmente presentes.

El ruido de los helicópteros, tal y como se han planificado los vuelos, podría perturbar a animales con un oído sensible, pero no causarles ningún daño.

El proyecto INFACT presta una especial atención y consideración a la protección de la fauna salvaje y del ganado, incluyendo sus condicionantes en la planificación de los vuelos.

Los pilotos de helicópteros vinculados al proyecto INFACT son expertos profesionales certificados que harán todo lo posible para minimizar este tipo de riesgos.

Asimismo, los drones serán pilotados por profesionales cualificados que seguirán los estándares de seguridad requeridos en todo momento y situación.

Los equipos de exploración y los mecanismos asociados a ellos cumplen con la normativa europea y nacional vigente en materia de seguridad y cuentan con los correspondientes certificados.

Las personas no tienen ningún efecto en las mediciones tomadas por los equipos de exploración, pero sí algunas estructuras artificiales.

Por ejemplo, las líneas eléctricas y otras estructuras metálicas de grandes proporciones necesitan ser identificadas durante las mediciones e incluidas en los análisis, pues alteran el campo electromagnético en sus inmediaciones. No obstante, se contempla no sobrevolar áreas habitadas, siempre que sea posible.

La definición de los enclaves de referencia permanentes es uno de los objetivos finales del proyecto INFACT y depende de muchos factores.

No obstante, el escenario ideal sería que el enclave de referencia permanente incluyese ambas zonas, pues sus características geológicas y los retos técnicos que representan son muy diferentes.

El proyecto INFACT ha realizado un trabajo de campo específico para determinar la existencia de puntos de nidificación de especies esteparias protegidas dentro de las áreas a sobrevolar. Para el verano de 2018, no se identificó ninguno.

Los equipos de exploración son en su mayoría “pasivos” y se limitan a registrar los campos electromagnéticos naturalmente existentes. En cuanto a aquellas tecnologías “activas”, que emiten una ligera señal electromagnética, los estudios científicos publicados que analizan sus efectos sobre la avifauna indican que éstos son despreciables.

Los helicópteros generan un nivel de ruido suficiente para perturbar a la avifauna, por ello en el diseño de la campaña se han tenido en cuenta las áreas más sensibles para las especies protegidas.